Día ocho de Septiembre es el día de
la
Comunidad
Extremeña.
La imagen de la Morenita. Atesorada por el pueblo español desde su
presentación en el año 580, fue durante el espantoso tiempo de la invasión
de los Moros, en el año 711, que la imagen fue escondida para ser
salvaguardada. Fue escondida en la provincia de Cáceres con los papeles
pertinentes que documentan su historia. Aquellos que protegieron la imagen
eventualmente murieron durante la conquista, razón por la cual se mantuvo
perdida la imagen por siglos. Milagrosamente fue hallada por un pastor llamado
Gil Cordero.
Andaba el pastor varios días buscando una vaca extraviada hasta dar con
ella y hallarla muerta. Al tratar de aprovechar la piel y hacerle en el pecho
la señal de la cruz el animal se levantó y en ese momento se le apareció la
Virgen que le habló, acomendándole la tarea de excavar en aquel mismo lugar
para encontrar su imagen y posteriormente edificar una ermita que a la postre
se convertiría en Monasterio y Santuario.
Actualmente para los
españoles se venera en el Santuario de
Guadalupe (Cáceres.)
Pidámosle hoy a nuestra madre, la Virgen de Guadalupe: Que
nos acompañe cada día de nuestra vida en nuestros Peregrinar
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Si se levantan los vientos de las
tentaciones, si tropiezas con los escollos de la tentación, mira a la estrella,
llama a María.
Si te agitan las olas de la
soberbia, de la ambición o de la envidia, mira a la estrella, llama a María.
Si la ira, la avaricia o la impureza
impelen violentamente la nave de tu alma, mira a María.
Si turbado con la memoria de tus
pecados, confusa ante la fealdad de tu conciencia, temerosa ante la idea del
juicio, comienzas a hundirte en la sima sin fondo de la tristeza o en el abismo
de la desesperación, piensa en María.
En los peligros, en las angustias,
en las dudas, piensa en María, invoca a María. No se aparte María de tu boca,
no se aparte de tu corazón; y para conseguir su ayuda intercesora no te apartes
tú de los ejemplos de su virtud. No te descaminarás si la sigues, no
desesperarás si la ruegas, no te perderás si en ella piensas.
Si ella te tiene de su mano, no
caerás; si te protege, nada tendrás que temer; no te fatigarás sí es tu guía;
llegarás felizmente al puerto si Ella te ampara
San Bernardo
ORACIÓN
Acordaos, ¡oh
piadosísima Virgen María!, que jamás se ha oído decir que ninguno de los que
han acudido a vuestra protección, implorando vuestro auxilio, haya sido
desamparado. Animado por esta confianza, a Vos acudo, oh Madre, Virgen de las
vírgenes, y gimiendo bajo el peso de mis pecados me atrevo a comparecer ante
Vos. Oh madre de Dios, no desechéis mis súplicas, antes bien, escuchadlas y
acogedlas benigna mente. Amén.