
RESUCITÓ
¡Aleluya!!!..
¡Aleluya!!!..
Orando repetía:
“Si es posible pase de mi este cáliz… pero no se haga mi voluntad
Sino la tuya…”
“Me amó y se entregó por mi…”
Que yo sepa, Señor, en cada instante unir mi voluntad a la del Padre.
Dios nuestro, que quisiste que la Madre de tu Hijo estuviera a su lado junto a la cruz, participando en sus sufrimientos, concede a tu Iglesia que, asociada con María a la pasión de Cristo, merezca también participar en su gloriosa resurrección.